martes, 11 de enero de 2011

Si no alarga, demanda

En el apartado extraño de noticias curiosas que puedo encontrar en páginas de este mundo, y porque cada vez realmente estamos más locos, hoy os traigo una noticia de un canadiense. El titular, sacado de la página web de Informativos Telecinco, es el siguiente:


"Demanda a los fabricantes de su alargador de pene tras usarlo más de 500 horas sin resultados"


Claro que sí, nuestro amigo canadiense, de Quebec, un día le da por ver que su colita no es lo suficientemente grande para él y que quiere tener un pollón para dejar mal a Rocco Siffredi. Se pone a buscar el chico y se da cuenta que hay un aparato que, atención a esto, y todo según las palabras del canadiense, promete aumentar el tamaño de la pilila por cuatro, es decir, cuadriplicar... pero a ver, ¿me estás contando que si tienes una pichurrina de 15 centímetros, gracias al aparato este te pasaria a medir 60? Pues el tío se lo creyó, y se lo compró gastándose para ello 262 dólares que aprox son unos 220 euros, más o menos lo que cuesta una Wii con el Mario Kart (por lo menos es algo útil), y después de usarlo 500 horas (lo que equivale a 21 días seguidos a 24 horas diarias dale que te pego al cacharro) pues ahí seguía su pipí como estaba antes, sin ninguna modificación, igual que hacía 500 horas.


Eso es dedicación no me digas, dándole con la manivela esa, le tuvo que salir callos, ampollas, dolores varios en su falo que quería poner como falete y se le quedó como falitillo. Pues le reclama ahora, con denuncia y todo, a su vendedor un total de 762 dólares por el dinero del cacharo en sí y 500 dólares más por daños morales y punitivos (creo que sería un euro por hora de escozor), no me extraña el pobre. Yo creo que lo que tiene que hacer es reclamarle eso, el dinero de las pilas del maquinillo y después devolverselo ya todo roto, hecho un desastre, averiado, oxidado, con los plásticos fastidiados... sí, así tiene que ser o sino tiene la salida que tienen los americanos que es hacer un mercadillo con sus cosas fuera de casa y venderlo por 10 euros con un boli Bic (como en Ebay).


Y lo peor de todo es que el juez admitió a trámite la demanda del bobo ese que todavia se cree que un cacharro puede hacerte medrar el pene y ponertelo cuatro veces mayor de como lo tenías... si es que este mundo es tan particular, y los canadienses más todavía. Lo raro es que esto no hubiera ocurrido en una parroquia de Galicia...

No hay comentarios: