lunes, 10 de enero de 2011

Conversaciones en un ascensor

Hoy, como todos los lunes me he despertado. La verdad es que un pelín cabreado porque ya se acabó el tema espiritu navideño, donde todos nos llenamos de bondad, nadie se cabrea por nada, nadie está susceptible, todo son sonrisas y alegría, pero el 10 de enero todo cambia.


Así que me desperté, preparé el desayuno, me afeité, una duchita mientras pensaba lo que me esperaba en el día de trabajo duro, me pongo mi traje, mi camisa y corbata y salgo de casa. Llego al ascensor, toco el botón y tarda alrededor de 30 segundos. Al fin llega al cuarto, abre la puerta (con esa voz de ascensor que dice "abriendo puertas" de forma robótica), subo y pulso el botón de la B. Empieza a bajar pero se para en el tercero. Se sube un hombre que me dice hola y mete la llave para bajar al garaje. Cierra la puerta el ascensor y se produce un silencio, ese silencio tenso, que yo no quiero decir nada porque no tiene sentido y encima estoy cabreado a la vez que pienso que qué gilipollez es montar en el ascensor, estar en metro y medio cuadrado con otra persona y no dirigirte la palabra, pero total para qué, no me va a aportar nada. Pero él, que debía haber follado la noche anterior me suelta un "¿Qué? Hay que volver a empezar eh, jeje"... Le miré, intenté forzar una sonrisa, levanté las cejas mientras mis ojos miraban a su boca risueña de "ayyy, qué feliz que soy en este mundo de la gominola y los tulipanes" y entonces le solté una palabra que intentó no sonar a borde, pero fue la que me salió de dentro en ese momento, la única que tenía sentido en ese instante, mientras el ascensor bajaba... así que mi boca se abrió y soltó un "Sí", seco, dominante, áspero. El ascensor se paró en la B, se abrió, le dije hasta luego y me fui, mientras él me soltó otro adiós alegre.


A ver, ¿qué le tenía que haber dicho a la frase "Hay que volver a empezar eh, jeje":


a) Sí, para eso están los lunes
b) Y tú también ¿no?, ¿dónde trabajas? ¿eres un funcionario de esos que se tocan los huevecillos no?
c) No tío, voy de traje y corbata a ver a tu puta madre.


Buff me puso malo. Aun así no supera a esas conversaciones de ascensor con señoras mayores. Diciembre, en mi piso, llego al portal y una señora esperando al ascensor que me mira y me dice "hola". Nos subimos al ascensor y comienza la conversación (V soy yo y S es la señora mayor):


S- Ufff, que frío, parece que refrescó.
V- Sí, la verdad es que sí, el tiempo está loco.
S- Mira como es, aquí a cuatro grados y mi hija en Canarias, que la acabo de llamar ahora, con 18 grados.
V- Es lo que tiene Canarias.
SILENCIO y llegada al Cuarto
V- Hasta luego
S- Adiós.


¿Por qué hablamos en un ascensor? ¿La señora no puede entender que en Diciembre refresca? ¿Es de esas que se traga España Directo cuando nieva en Navidad? ¿por qué ponen como algo tan sumamente especial una nevada en Diciembre?... si nieva en Agosto ¿qué hacen? ¿un canal 24 horas para la nevada? ¿y en Canarias 18 grados? Señora, a ver, que supongo que por lo menos haya leído la Enciclopedia Alvarez donde explican que en Canarias siempre hay una estabilidad en las temperaturas, pero bueno, hay que aguantarlo.


Lo siento, no sé si es claustrofobia, no sé si es que me levanto borde, no sé si es que no soporto las conversaciones que no me aportan nada, pero si alguna vez te subes conmigo en un ascensor procura decir cosas aceptables, porque si vas a decir chorradas mejor coge el móvil para mirar nada, levanta la vista como que estás pensando algo sumamente importante o haz lo que hace todo el mundo, mirar como van subiendo los números de los pisos mientras va subiendo el ascensor.

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